y he dejado de respirar.
¿A dónde iba a poder recuperar el aire?
Los pulmones perezosos abandonaron su tic tac
y ahora ya, cuando tú gritas,yo me vuelvo a callar.
Sé que no podrá seguir pasando,
lo sé,
lo oigo en tu mirada que se posacomo un pájaro de nieve.
Como un pájaro o como una rosa.
He dejado de respirar,
aunque me respiras:
pues si he de morir no será ahora,
no será, no tendrá esa carga.
Si he de morir, moriré,
pero habrá merecido la pena
haber vivido.